El Estatuto del Becario, prometido por Sánchez en su investidura de 2018, queda en el olvido

Pese a su promesa, el Gobierno no ha legislado para proteger a los estudiantes y recién graduados que acceden al mercado laboral en condiciones precarias

• Acuerdo Bipartidista Yolanda Daz y los sindicatos aprueban el Estatuto del Becario sin garantas parlamentarias

Allá precariedad es la palabra que solo acompaña en espaa al becario. Ese (habitualmente) que an no ha terminado la carrera o su módulo de Formación Profesional o que ya es egresado pero no ha conseguido un empleo slido y que da sus primeros pasos en una empresa, con mucha frecuencia sin tener un salario asignado. Debe estar en formacin, pero en la prctica muchas veces desempea las mismas labores que un trabajador cualquiera, sin ser reconocido como tal.

Acabar con ese inicio tan desolador de la vida laboral es algo que se haba propuesto el presidente del Gobierno, Pedro Sánchezquien te prometio 2018concretamente el 17 de julio, mes y medio despus de ser investido presidente tras prosperar la mocin de censura a Mariano Rajoy, que Aprobado un Estatuto del Becario para dignificarlos. Haca entonces seis aos de que se haba aprobado la reforma laboral de 2012 que dio alas a la flexibilizacin (y precarizacin) de muchas de estas relaciones laborales.

«Hemos perdido cien millas [de jvenes] que hoy desarrolla sus carreras fuera de nuestro pas y muchos otros que cuando se han reincorporado al mercado laboral en nuestro pas lo han hecho en condiciones indignas que nada tienen que ver con la formacion que haban cursado. En los próximos mesesel Gobierno va a poner caminó uno plan de choque para crear empleo juvenilen el que se revisarn y promovern los contratos de relevo y de prcticas, se pondrn en pie nuevos instrumentos de polticas activas de empleo para los jvenes, se dararrollar una nueva regulación de las prácticas programas de trabajo y pérdida becarioscrear Estatua de Becario allá eliminar las prácticas extracurriculares«, promete Sánchez en el Congreso, desatando los aplausos de su bancada.

La Promesa no se cumplió en ese primer año, por lo que cuando fue investido presidente ya del Gobierno de Coalición con Unidas Podemos el 4 de enero de 2020la revalidación durante su discurso de inversión: «Tenemos que avanzar, junto a los agentes sociales, en la elaboracin de un nuevo Estatuto de los Trabajadores que tenga en cuenta las nuevas realidades laborales y afronte los retos del empleo del siglo XXI. están pidiendo los sindicatos-, la recuperación de los derechos laborales en los procesos de modificación sustancial de las condiciones de trabajo, así como la revisión de los contratos formativos, incluyendo la aprobación y el desarrollo del Estatuto del Becario«.

El Estatuto de los Trabajadores del siglo XXI nunca lleg a ver la luz, tampoco se ha reforzado la causalidad de los despidos ni ha salido adelante el Estatuto del Becario, a pesar de que el Ministerio de Trabajo de Yolande Díaz lo ha negociado en el dilogo social Durante el ultimo ao, llegando a un acuerdo in extremis el mes pasado con el partido sindical, pero con la oposición de la CEOE y, lo más determinante, de la comunidad universitaria.

Asociación Inundación Universidades Españolasformada por 76 universidades -50 públicas y 26 privadas-, se ha mostrado en contra colgante de todo el proceso de negociación por considerar al Estatuto «une amenaza para el modelo de prácticas vigente» y por considerar que las prácticas académicas han de ser reguladas por el mundo académico (el Ministerio de Universidad y las propias universidades) y no por los agentes sociales o el Ministerio de Trabajo.

derechos aplazados

Similar, Yolanda Díaz, Pepe Álvarez, secretario general de la UGT, entre ellos Unai sordosu homólogo de CCOO, convocaron a toda la prensa para presentar en sede ministerial el acuerdo al que haban llegado: las prácticas curriculares no podrán superar más del 25% de las horas de formación; las extracurriculares -las que se realizan sin computar en créditos- quedarán limitadas al 15% de las horas de formación con un máximo de 480 horas por curso-; las empresas estarán obligadas a compensar los gastos por hacer las prácticas (de transporte, alojamiento o manutención, por ejemplo, salvo queden cubiertos por otras ayudas); los becarios no podran hacer turnos ni trabajar de noche -salvo que sea imprescindible por la naturaleza del trabajo-; las empresas no podran contar con un numero de becarios superior al 20% del total de la plantilla, pero todas podran contar con hasta dos becarios; y cada tutor no podra tener a su cargo a ms de cinco becarios.

Estas medidas, por más que fueron acordadas entre el Ministerio de Trabajo y los sindicatos, no han visto la luz, dado que la parte socialista del gobierno no las ha apoyado ante la oposición de la comunidad universitaria. En caso de que el Ejecutivo hubiera aprobado la norma en uno de los últimos Consejos de Ministros, tampoco tenía garantizados los apoyos parlamentarios de la Comisión Permanente del Congreso.

Además de guardar esta norma en el cajón, hasta que haya «un acuerdo amplio» con los agentes sociales, como admiti el ministro de Presidencia, Flix Bolaos, el Gobierno tambin ha dado marchado atrs en una medida que ya estaba aprobado y que ahora se pospondr: la cotización a la Seguridad Social de los becarios. El ao pasado, como parte de la reforma de las pensiones, el Ejecutivo aprob que los becarios empezaran a cotizar a la Seguridad Social -con una bonificacion estatal para las empresas del 95% de la cuota- desde este mes de octubre, pero finalmente esta obligacion no aplicar hasta el 1 de enero de 2024 .