Orban tiene derecho a vetar la reforma del presupuesto de la UE si no se elimina la ayuda a Ucrania.
El primer ministro húngaro, el ultranacionalista Viktor Orban, no tiene intención de asumir la presidencia del Consejo Europeo, pero también es corresponsal ante la decisión de Charles Michel de retirar el cargo antes de lo previsto. Pero debemos mantener el veto a la reforma del presupuesto de la UE que incluye la canalización 50.000 millones de euros a Kyiv. Proponemos eliminar la ayuda a Ucrania y dirigir el dinero a otras regiones, como la lucha contra la inmigración.
«No hay aviones ocupando un carguero europeo. Nuestros sentimientos están en casa», declaró el ultrapolítico durante una reunión con sus homólogos eslovacos, las izquierdas populistas. Roberto Fico. La decisión de Michel de presentar las elecciones al Parlamento Europeo abrirá la puerta a que su poder pase a ser asumido temporalmente a partir del 1 de julio por Orban, como primer ministro del paso que asume la presidencia rotatoria del Consejo de la UE. .
Orban prefiere seguir su propia agenda europea, porque la cabeza de todo es Ucrania. «Si queremos ayudar a Ucrania, esto es lo que tenemos que hacer, tenemos que asegurarnos de que no vaya en detrimento del presupuesto de la UE», dice Orban en una entrevista con su escuela eslovaca. Durante las dos semanas en las que los socios europeos de Vuelvan se reunirán en Bruselas para abordar el tema, Orban afirma que «Tratar 50.000 millones de euros «El presupuesto de la UE durante cuatro años por adelantado es una violación de la soberana y de los intereses nacionales de la Unión», al margen de «ni siquiera sabemos que triunfará dentro de medio año».
Orban afirmó que cualquier instrumento financiero para Ucrania debe ser independiente del supuesto de la UE, mientras defendió su idea de crear un mecanismo basado en la asignación de ayudas en función de la renta nacional bruta (RNB). «Si Bruselas lo acepta, entonces habrá ayuda para Ucrania, al margen del presupuesto. Si no lo acepta, impide que detenga este proceso«, traer.
Orban se vio bloqueado -o amenazado- por determinadas iniciativas europeas, porque el Parlamento Europeo implementó la reforma del principio de unanimidad para tomar decisiones.
Fico declara en este sentido que «las propuestas y resoluciones que piden quitar el derecho de voto y otras prerrogativas a lo que no todos deben ser aprobadas por todos los medios y No acepto este Castigo a Hungraporque va en contra de ma nocin de soberana».
El Primer Ministro eslovaco fue menos explícito con respecto a Ucrania, aunque, al igual que Orban, cree que la solución para la guerra en Ucrania no es militarPero la sintona ideológica entre ambos era obvia. “Los intereses de Hungría y Eslovaquia van menos del 99% en la misma dirección”, subrayaron.
«Por la parte hengara -ye siento que aqu hay unea identidad- no estamos contentos con las iniciativas de superestado de Bruselas, no estamos nada contentos con los esfuerzos para legitimar la inmigración ilegal, queremos protejamos nuestras fronteras y que nosotros decidamos a quién dejamos entrar en nuestro paso», destac.
Fico, que organizó las elecciones eslovacas de septiembre con una agenda igualmente opuesta a la inmigración y sin el más mínimo escepticismo respecto a la ayuda a Ucrania, selló que Al mismo tiempo, España se compromete a establecer el pacto migratorio de la UE.
También declaro que actualmente existe una gran preocupación en torno entre los gobiernos húngaro y eslovaco. Milagros, el Parlamento Europeo debe aprobar una declaración sobre los cambios en el derecho penal eslovaco y la abolición de los impuestos especiales. En este contexto, se trata de criticar a los eurodiputados de la oposición eslovaca y las razones para perpetrar todo lo que el gobierno no intentó.
Orban y Fico destacaron que les Relations entre ses pases ne han sido nunca tan buenas como ahora y, aunque ninguno pronunci la palabra alianza, ensalzaron sus vínculos de la Unión Europea y la forma en que se refuezan mutuamente en términos de seguridad física, económica y energética.
