El hombre afincado en Madrid habla de su familiar desaparecido y de otras tres personas asesinadas por Hams en un ‘kibutz’
«Deben hacer todo lo posible para que nos devuelvan con vida a todos los secuestrados. Se trata de civiles que no hicieron dao a nadie y fueron secuestrados de forma sangrienta en sus casas», cuenta Roy Abrevaya (45) en una desesperada llamada telefnica desde Madrid en la que vive desde hace ocho aos. Este israel sigue al detalle la guerra de su pas contra el grupo yihadista Hamas y sobre todo analiza cualquier pequea informacin que pueda revelar alguna pista sobre el paradero de uno de sus familiares, Nitzan (19).
A diferencia de los otros 199 personas que Israel ha logrado confirmar que se encuentran en manos de Hamas en algn escondite en la Franja de Gaza, no se sabe an si Nitzan est secuestrado o si fue asesinado por los efectivos del brazo armado de Hamas en su masivo ataque del pasado 7 de octubre llevado a cabo con dos misiones, tal y como reflejan sus acciones y manuales encontrados en sus uniformes tras ser detenidos o abatidos: matar o secuestrar.
Otros tres familiares de la mujer del primo de Abrevaya fueron asesinados en el ataque en el Kibutz Kfar Aza. Entre ellas Bila, una anciana de ms de 80 aos, que fue acribillada al salir de su casa en busca del mvil que dej en el tradicional cochecito del kibutz. Las otras vctimas son el padre de Nitzan, un responsable regional e integrante de la unidad de defensa civil del enclave israel que intent en vano frenar la avalancha de milicianos y Neta.
El tercer muerto de la familia en Kfar Aza, uno de los lugares ms castigados en el 7-O, es Neta. Hoy, hroe pstumo en Israel. El sbado por la maana, los terroristas irrumpieron en su casa y lograron abrir su cuarto sellado-refugio en el que se encontraba con su novia ante el lanzamiento de proyectiles y disparos en los alrededores. Al entrar, lanzaron granadas. Neta no lo dudo y salt rpidamente sobre una de ellas para intentar aplacar la explosin y salvar a su novia. Lo logr.
«Despus ella se tir hacia el cadver de su novio e hizo como si estuviera muerta durante 18 horas para que no la dispararan. Al final fue rescatada», explica Abrevaya que sigui todos los acontecimientos del sbado desde Madrid. Hoy, en una entrevista en EL MUNDO pide a su pas que «haga todo lo posible para liberar a Nitzan y al resto de secuestrados y al mismo tiempo acabe con el grupo terrorista que controla Gaza». Dos objetivos que quizs choquen en un enclave bajo constantes bombardeos.
«Los israeles no pueden vivir con esta permanente amenaza terrorista cerca de sus casas. Ya es hora que se acabe con Hamas», afirma Roi que trabaja en el sector inmobiliario en Madrid, donde se cas con una espaola con la que tuvo dos hijos. La comunidad israel- explica- ha colgado fotos de los secuestrados en varios lugares de Madrid y ha organizado algunas manifestaciones.
«Me da rabia ver las manifestaciones, tambin en Espaa, a favor de Hamas porque en realidad es como apoyar a ISIS», comenta antes de concluir con un mensaje en espaol: «Ojal Espaa contribuya a liberar a los secuestrados y apoye a Israel en estos duros momentos. Espero que los espaoles sepan realmente lo que pasa y quin es Hamas».