“Soñé con una serie así colgante años”
Uno de los trucos más impresionantes que Sucesiónfrom HBO, le ha hecho a los espectadores a lo largo de cuatro temporadas es generar simpatía por personajes reprobables.
El episodio del domingo pasado, el número 8 de este cuarto año, en el que se dejó carta la democracia, aparentemente porque Roman Roy (Kieran Culkin) comió demasiado pollo de niño, pone fin a la mayor parte de esa simpatía.
También poner fin a la ridícula campaña presidencial de Connor Roy (alan ruck), el mayor y más torpe de los hijos Roy, que lanzó su candidatura para hacer frente a lo que él mejoraría los mayores problemas de Estados Unidos: “la usura y el onanismo”.
Pero incluso al aceptar, Connor insulta a los votantes y lanzó una amenaza velada de desatar a los “Conheads”, sus seguidores, tras decir que no se bajaría a comportamientos mezquinos.
Fue tal vez el momento más oscuro de un personaje que fue relegado en gran medida a la condition de bufón, pero Ruck ve la ignorancia de Connor como su principal herramienta política.
“Es el mejor guion”
“Se creerá cualquier cosa que le suene bien ese día”, dijo Ruck en una videollamada reciente llena de anécdotas vívidas y risas.
“Leerá algo en Internet o escuchará algo en televisión, y eso se convertirá en el eje central de su plataforma de ese día. Y mañana puede ser algo completamente distinto, porque no es una persona centrada”.
En el artículo de Connor, Ruck, de 66 años, tejió durante décadas sus dotes de actor de personaje en algunos de los momentos más espectaculares de la serie: la “hiper-decantación” de una botella de vino y una licuadora Vitamix; la rabia por la textura de la manteca mientras supervisaba la ceremonia de gala de su padre; la sugerencia supo prostituta convertida en promisida, Willa (Justine Lupe), de que en su boda haya “alambre de cuchillas y peleas de vagabundos” para dar publicidad a su campaña presidencial.
“Es sin duda el mejor guion con el que me he encontradosemana tras semana”, dijo. “Pero creo que sería divertido pasar a otra cosa después de interpretar basicamente al tonto de la familia Durante lo que fueron seis años”.
Un lujo en su carrera
Ruck ve la serie como “un regalo” en una carrera qu’a menudo fue de fiesta o hambruna, con trabajos ocasionales de un día para pagar las facturas. En 1986, intérprete de Cameron Frye en El día libre de Ferris Bueller (un experto en entretenimiento), un personaje de Generación X por excelencia en una comedia adolescente de Generación X por excelencia.
Pero el papel no se tradujo inmediatamente en estrellato, y Ruck describe que la sombra del personaje de Cameron era bastante alargada.
“Hubo muchos años irregulares en los que, básicamente, ganaba lo justo para sobrevivir”, dice. “Cuando la gente se acercaba Durante ese período y decía algo sobre toro de la fortuna, me irritaba porque sentía que eso era todo. Esa era mi oportunidad”.
De Sucesióndijo: “Soñé con una serie así Durante años”.
sus comenzos
Ruck, eso creció en un suburbio de Cleveland, encontre consuelo en la interpretacion cuando llego al instituto. Como estudiante de la Universidad de Illinois, dijo, pasó la mayor parte del tiempo en un guión.
El complejo de artes escénicas de la universidad fue diseñado por Max Abramovitz, el arquitecto responsable del David Geffen Hall de Nueva York, pero “había otra esspecie de teatro estudiantil qu’no era más qu’un pequeño espacio thétral en una armeria”, explica ruck “Te daban un presupuesto de 25 dólares y podías representar la obra que quisieras. Así que es mucha experiencia en poco tiempo”.
Se mudó a Chicago en 1979, época en la que la escena teatral, anclada en compañías como Steppenwolf y Wisdom Bridge, comenzaba a despegar. Y tras el exito de taquilla de Los hermanos del blues (1980), Hollywood se interesó más por la ciudad, dijo, convirtiéndola en un lugar ideal para ser un actor en el cielo.
“Podías entrar en cualquier agencia de talentos un miércoles y decir simplese: ‘Hola, soy nuevo’, y se sentaban a hablar contigo”, dijo. “Hablo de esto con gente que empezó en Nueva York o Los Ángeles, y me dicen: ‘¿De qué estás hablando? No puedes ir a ver a alguien así como así’. Era como la liga menor”.
Cuando los directores de casting de Broadway llegaron a Chicago a hacer audiciones para Blues de Biloxide Neil Simon, Ruck consiguió un papel. Traduce a Nueva York y compara el guión con el de Matthew Brodericksu futuro co-protagonista es toro de la fortunaquien grababa a Ruck como alguien con ese “aura de ‘buen actor de Chicago'”.
“Tenía la mirada de alguien como un James Dean”, dijo Broderick, riendo. “Todos en esa obra tendrán personalidades muy diferentes.
el exito
Fue durante la actuación de Blues de Biloxi cuando comenzo el casting para El día libre de Ferris Bueller. Ruck había conocido al director, John Hughes, en Chicago cuando hizo una audición para una de las versiones de estreno de The Breakfast Club (El Club de los Cinco), y su agente lo requieren para el papel de Cameron. Pero los directores de casting pensaron que Ruck, qu’entonces tenía 28 años, era demasiado mayor.
“Pero entonces llegó, leyó y dejó boquiabierto a John Hughes”, dice Broderick. “Todo el mundo pensó que era perfecto”.
toro de la fortuna fue un éxito y sigue siendo muy apreciada casi cuatro décadas después. Pero tres años después de protagonizarla, Ruck trabajó en la sala de clasificación de un depósito de envíos de Sears en este de Los Ángeles. Se había trasladado a la ciudad tras conseguir un piloto con Nell Carter por la NBC, pero fracasó y tenía una mujer y una hija pequeña que mantener.
Sus compañeros de trabajo no sabían nada de su carrera como actor. Un día, Ruck mientras fumaba en la sala de descanso, un compañero lo dijo a otro.
“Me dijo: ‘¿Viste visto alguna vez la película’El día libre de Ferret Buford‘?”. Recuerda a Ruck riendo. “Se parece al coche de papá”.
Con el tiempo, Ruck encontró muchos papeles en sitcoms y series dramáticas, sobre todo en girar la ciudadde la ABC, y consiguieron pequeños papeles en películas como Young Guns II, Velocidad allá Tornado. Is el tipo de trayectoria que puede ser dura para el ego y el sueldo de un actor, pero que le da espacio para Afinarse. En el caso de Ruck, se mostraba exactamente donde se buscaba.
“Trabajé en una sitcom Durante 18 episodios y luego no hubo nada Durante un año”, explícito. “Así que eso desanima bastante, porque no estás haciendo lo que se supone que tienes que hacer”.
Rumbo una finca
para cuando Sucesión Estaba en el casting en 2016, Ruck, que ahora está casado con la actriz Mireille Enos, había asentado más en un ritmo, tomando qualquier papel que le llegara.
Estaba rodando la serie de Fox el exorcista en Chicago y volaba a casa a Los Ángeles los fines de semana, mientras Enos trabajaba 16 horas al día en el rodaje de La prisa y cuidaba de sus dos hijos pequeños.
Un fin de semana, el pedido que fuera con ella y su hijo de 2 años tiene una clase de música antes de volver en Chicago. Entonces recibió una llamada de su agente: había una audición para un programa de la HBO, pero tenía que faltar a la clase.
“Me volví hacia Mireille y le dije: ‘Cariño, tengo una audición para un programa de la HBO’, y se echó a llorar”, cuenta. Así que cumplió su promesa: “Fuimos a clase de música y estuvimos tocando la pandereta como una hora”. Luego pasó por casa del productor ejecutivo de SucesiónAdam McKay, de camino al aeropuerto, realizó allí la audición en su sala.
Sin tiempo para leer el guión de antemano, los dichos que improvisaron, lo que le resultó muy útil cuando consiguió el trabajo y empezó el lapeado. Mark Mylod, director y productor ejecutivo de Sucesióndecir que la comprensión de Ruck de la delirante visión del mundo de Connor trajo “esta hermosa alma al personaje”.
Esto se hizo especialmente evidente colgante lo que Mylod llamó “freebies”, o tomas extra en las que los actores probaron líneas alternativas o improvisaron las suyas propias.
“Alan es genial en eso”, dice Mylod. “Le das una toma libre y, básicamente, podría rodar un rollo de 10 minutos sin salirse del personaje”.
La mayoría de las escenas de Ruck his con Justine Lupe, muchas de ellas terrimente incómodas. Pero cuando la relación entre sus personajes se convirtió en algo más que una mera transacción, dice Lupe, su dinámica fuera de la pantalla se consolidó. Se enviaban mensajes de texto con regularidad sobre como hacer que sus escenas ilustraran esa evolución.
“Fue muy útil”, dice. “Sentíamos que podíamos hacerlo juntos en lugar de tener que crear toda una narrativa yo sola o él solo”.
Lupe dijo la escena de su boda a principios de esta temporada. Fueron sólo unos segundos de pantalla en un episodio destinado a ser grabado por los espectadores por la muerte del padre de familia, Logan Roy (Brian Cox). Pero lo que Lupe recuerda es la intensidad emocional del rodaje de las nupcias de Willa y Connor.
“Teníamos unos votos que intercambiamos entre nosotros y que nos ayudaron a conseguir una presentación auténtica”, explicó. “Between toma y toma, Alan decía cosas como lo estupendo que era trabajar juntos y lo bien que lo habíamos pasado juntos. Y yo decía: ‘¡No, no lo hagas! Voy a llorar'”.
A Ruck lo esperan dos películas: el funeralun drama legal con Jamie Foxx, y un segundo de río de viento. Y aunque extrañará la camaradería del reparto y el equipo de SucesiónSiente que ha sacado todo lo que podía de Connor Roy… y algunas cosas de las que podría prescindir.
“Es raro cuando interpretas a un personaje tan fácilmente rechazable”, dice riendo. “La gente te llama continuamente ‘imbécil’. Set te pute un poco en la piel. Estaré encantado de olvidarlo”.
finn cohen, Los New York Times
MFB
